Me apasionan los videojuegos y es evidente que disfrutaría como un niño de esta afición si contara con un equipo más potente, sin embargo, la realidad no es siempre la que nos gustaría y, en ocasiones, no disponemos de los fondos necesarios para realizar la inversión deseada. Con el paso de los años, las obligaciones y las cargas familiares se convierten en factores que condicionan el tiempo y el dinero que podemos emplear en nuestros hobbies y, a pesar de todo, al menos en lo que respecta a mi situación personal, trato de hacer lo posible por llevarla adelante. Pero vamos, centrémonos en el tema que nos ocupa, que no quiero aburriros demasiado con mis divagaciones.
Con el presupuesto como principal limitación —un máximo de 400 euros—, comencé a buscar todo tipo de ofertas hasta dar con la configuración que mejor se ajustaba a mis exigencias hasta que, finalmente, me topé con mi actual torre —de la marca HP— en oferta. Es probable que por el precio original se puedan descubrir opciones más interesantes, pero por su valor, una vez rebajado, no encontré nada que mereciera más la pena. Es más, hacer una composición por piezas fue una idea que me planteé desde el principio pero, al tratarse de un ordenador tan modesto, no me compensaba especialmente y decidí descartarla.
Incorpora un Ryzen 5 4600G —con 6 núcleos a 3,7 GHz y 4,2 GHz con Turbo Boost— como procesador, 16 GB de RAM DDR4 a 3200 MHz, un SSD con 512 GB de capacidad de almacenamiento e interfaz PCIe. En lo referente a puertos de conexión, sin entrar en excesiva profundidad, cuenta con un conector Jack, 8 USB —4 en la parte delantera y otros 4 en la trasera—, salida HDMI e incluso un lector de tarjetas SD, entre otros. Eso sí, este ordenador no tiene instalado ningún sistema operativo, aunque eso tampoco me supuso ningún inconveniente. Hay muchas características más de las que podría hablar y, a menos que me lo pidáis expresamente, no veo necesario hacerlo para no convertir esto en un texto pesado y saturado de datos. Para cualquier duda nos leemos en los comentarios.