Mi primera toma de contacto con «Super Mario 3D World» tuvo lugar, aproximadamente, hacia principios del año 2014, el cual, tuve el privilegio de disfrutar en la Wii U que poseía por aquel entonces. Desde que anunciaron su salida para Switch junto a la expansión «Bowser’s Fury» —que jamás llegué a probar—, permanecí muy atento a su evolución. Es cierto que me apetecía disfrutar de esta versión mejorada por el contenido extra que, hasta ese momento, no había tenido ocasión de catar, pero de lo que realmente tenía ganas era de sacarle partido a su faceta más familiar, su cooperativo. Con esa idea en mente, unos meses después de su salida al mercado, acabé por incorporarlo a mis estantes junto al resto de mi colección, pero no ha sido hasta hace relativamente poco tiempo que no he encontrado un hueco para ponerme con él.

¡Oh, no! ¡Peach ha vuelto a ser secuestrada! No, disculpad, parece que esta vez el malvado Bowser ha decidido alejar sus zarpas de la princesa del «Reino Champiñón». ¿Qué diantres estará tramando ahora? Si tenías la esperanza de ver un giro radical en el planteamiento normal de los acontecimientos, me temo que no va a ser así. En efecto, en este juego su objetivo es otro, las «Princesas Hadas», pero la tónica será, básicamente, la misma —rescatarlas, vaya—. Pero tranquilos, a estas alturas no hay motivo para sorprenderse, todos sabemos de sobra que la trama no suele ser, precisamente, el aspecto más innovador de los títulos de la franquicia. No obstante, sí que existen otros puntos que sacan a relucir sus bondades, especialmente aquellos que guardan una estrecha relación con el apartado jugable —mayormente, sus mecánicas—.

Hasta cuatro jugadores se podrán sumar a esta aventura y recorrer sus coloridos niveles con total libertad de movimiento. Además, como no podía ser de otra forma, realizaremos nuestra travesía con la ayuda de múltiples trajes —uno de gato inclusive— y acompañados de sus clásicas melodías. No quiero desvelar más de la cuenta en relación con su contenido, por lo que únicamente diré que nos encontraremos algunos pequeños minijuegos que tratarán de ofrecer algo de variedad a nuestra experiencia —tampoco en exceso—. En conclusión, creo que en «Super Mario 3D World» encontraréis un juego ideal para pasar un rato divertido, tanto si decidís completarlo en solitario como en compañía.